¿La hipnosis es eficaz para el eczema?

La hipnosis puede mejorar el día a día

Se sabe que el eczema puede empeorar con el estrés, la depresión o la ansiedad. Sin embargo, la hipnosis puede ayudar a relajar la mente. Al tranquilizar la mente, la hipnosis puede reducir el impacto del estrés en el eczema. Por ello, hoy forma parte de las soluciones complementarias a los tratamientos médicos.

Cómo afecta el estrés al eczema

Lo más importante que hay que comprender sobre el estrés cuando se habla de eczema es que no es la causa de la enfermedad. En otras palabras, es totalmente falso afirmar que el eczema “está en la cabeza” y, sobre todo, es muy contraproducente hacer sentir culpable a la persona que sufre de eczema o denigrar la realidad: el paciente no lo ha provocado con sus pensamientos, su enfermedad tiene causas concretas y conocidas (la piel atópica).

Sin embargo, lo que sí es cierto es que la inflamación del eczema puede agravarse por el estrés u otros factores psicológicos, o que un brote puede ser desencadenado por el estrés. Por lo tanto, es importante asegurarse de que la mente se encuentre lo más relajada posible, para poder relajar también el cuerpo.

La conexión mente-cuerpo es una conexión real

El impacto del estrés o de enfermedades psíquicas como la depresión en el eczema es muy real.

Hoy día conocemos muy bien la cadena de causalidad que hace que el estrés aumente la inflamación.

“Al reducir el estrés, evitamos por tanto que el eczema adquiera más fuerza de la que tiene”.

La hipnosis para reducir el estrés

La hipnosis es un medio reconocido y establecido para reducir el estrés o la ansiedad. Por lo tanto, sería un error privarse solo por las ideas preconcebidas que existen al respecto (más adelante hablaremos sobre el tema). Y es que al limitar el estrés, limitamos el riesgo de que se produzca una crisis o se agrave la inflamación.

¿Cómo consigue la hipnosis relajar en la práctica?

El objetivo es hacer sugerencias a la mente, para que encuentre nuevas formas, nuevas “posturas” para relajarse. Más concretamente, se trata de desencadenar un estado de concentración o atención muy focalizada, que permite modificar determinados aspectos del pensamiento, la emoción, el comportamiento o la percepción.

Hay que dejar a un lado los mitos sobre la hipnosis

La idea preconcebida más extendida es que se pierde el autocontrol. Seguro que ya lo han oído antes, ¿verdad? Por supuesto, se trata de un mito, porque cuando estamos bajo hipnosis:

mantenemos el control de nuestro comportamiento
estamos al tanto de lo que sucede
recordamos lo que ha ocurrido (a menos que el olvido sea intencionado)

¡No se puede encargar a alguien que cometa un robo para nosotros bajo hipnosis! De hecho, la hipnosis es precisamente todo lo contrario de una pérdida de autocontrol, ya que este estado nos permite controlar cosas que no logramos controlar en estado de vigilia, como ciertos estados de nuestra mente.

“Aunque la hipnosis suele implicar relajación e incluso sueño, la actividad cerebral durante la hipnosis se aproxima más a la de una persona despierta”.