¿Se trata de eczema o de sarna? A continuación presentamos las diferencias...
Aunque se parecen a simple vista, no tienen nada que ver.
Como la sarna pica y puede parecerse al eczema en determinados aspectos (enrojecimiento y vesículas, lesiones de rascado), a veces se confunde con el eczema al principio. Conviene no confundir ambas enfermedades, ya que la sarna es benigna pero contagiosa.
¿Qué es la sarna?
Se trata de una enfermedad contagiosa causada por un ácaro. El parásito se instala en la piel, causando picor y lesiones. No puede verse a simple vista, así que de nada sirve buscarlo con los ojos: tan solo el médico podrá confirmar su presencia utilizando un dermatoscopio.
El ácaro que causa la sarna es el Sarcoptes scabiei hominis.
¿Cómo saber si se trata de eczema o de sarna?
He aquí algunos signos que pueden sugerir la presencia de sarna en lugar de eczema:
- Otros miembros de la familia se rascan.
- Aparece en lugares que no son habituales en caso de eczema (nalgas, axilas, espacio entre los dedos, genitales...).
- Hay rastros o “surcos” en la piel vinculados con los desplazamientos del parásito en la epidermis (aunque son diminutos y difíciles de detectar para los no expertos).
- Los dermocorticoides parecen no surtir efecto.
- En los lactantes aparecen vesículas y pequeñas lesiones rojas en relieve en las plantas de los pies (los denominados “nódulos escabióticos”).
A veces resulta muy difícil distinguir el eczema de la sarna....
¿Cómo se trata?
Es esencial consultar a un médico, que podrá confirmar el diagnóstico. Como es natural, ¡el eczema y la sarna no se tratan de la misma manera!
Tratamiento del eczema
Se usan dermocorticoides para calmar el picor y una solución adaptada, según se trate de eczema alérgico o atópico.
Tratamiento de la sarna
Esta enfermedad puede tratarse fácilmente.
La mayoría de las veces se trata aplicando tratamientos antiparasitarios en forma de crema o loción por todo el cuerpo y tomando medicamentos antiparasitarios por vía oral. Todos los miembros de la familia deben recibir el tratamiento. Por supuesto, también hay que procurar deshacerse del parásito en el entorno del paciente: lavar la ropa, las sábanas, etc.